Nuestras raíces en la industria del cloro, la sosa cáustica y la potasa son profundas, desde la creación de las primeras celdas de diafragma comerciales a principios de los años 1920, las celdas de mercurio en los años 1940, hasta el desarrollo de la primera celda de membrana en los años 1970, y la concentración en las estructuras de electrodos y recubrimientos catalíticos de mayor rendimiento actuales.
Nuestra empresa atiende una amplia gama de necesidades de los clientes para diversos procesos electroquímicos y se centra principalmente en electrodos y catalizadores de alto rendimiento para la industria cloro-álcalis.